jueves, 8 de junio de 2006

Conversaciones con una pared

  • Tienes un problema… y es grave.
  • Si sólo fuera uno… tengo varios.
  • Sí, pero uno importante…
  • Bueno, muchos son importantes…
  • No lo quieres admitir.
  • Yo creo que lo admito, es más, te estoy admitiendo que tengo varios problemas importantes.
  • Pero no admites el que yo quiero que admitas.
  • Te lo admito.
  • No quieres seguir discutiendo, es eso.
  • Ya estamos… no, no quiero discutir, pero tampoco creo que lo estuviéramos haciendo… estábamos hablando, sin más.
  • En realidad yo creo que sólo tienes un problema, y de él derivan todos los demás.
  • Podría ser… pero no del problema que tu dices. De ese problema no derivan ninguno más.
  • Yo creo que sí.
  • No veo cómo.
  • Te afecta, entonces extrapolas.
  • Me afecta, seguro. Y probablemente afecte a mi “estar” diario, pero poco más.
  • Estás alicaído, triste, ojeroso…
  • Pero no sólo por ese problema… resulta que se acumulan todos.
  • Pero si sólo tuvieras ese… ¿cómo estarías?
  • Ya te digo yo que estaría mejor que ahora.
  • Al final va a tener razón el anónimo, eres un capullo.
  • Probablemente, cualquiera que diga algo de mi puede tener razón… o puede no tenerla.
  • Me quieres decir que no eres un capullo.
  • No, lo soy.
  • ¿Entonces?
  • Entonces, ¿qué?
  • Eres un capullo. ¿Eres también un pringao?
  • Mmmmm… probablemente… sí.
  • ¿Y un cabrón?
  • Depende de para quien, seguro que sí.
  • ¿Para ti?
  • Para mi soy tonto, abnegado, imbécil… lo que tu quieras.
  • ¿Y un cabrón?
  • El más cabrón cuando se trata de competición.
  • Eso es una canción, ¿no?
  • Sí.
  • Y viene a decir…
  • Que sí, que soy un cabrón cuando tengo que serlo… bueno, a veces me sale sin querer.
  • Supongo que sí lo soy.
  • ¿Y un hijodeputa?
  • Mi madre no tiene culpa de nada.
  • Ya, no me vengas con tonterías. No en el sentido literal de la palabra, sabes de qué hablo.
  • Supongo que para algunos sí.
  • Otra vez. Dejémoslo. ¿Cuánto tiempo llevas con esa actitud?
  • ¿Qué actitud? ¿Ser un cabrón? ¿Un hijodeputa?
  • Con la actitud de no dar tu opinión, con la actitud de no responder si no se te pregunta concretamente, con la actitud de pasividad…
  • Mmmmm… un par de años o tres, quizás más. Pero es imposible cumplirla. A veces se me escapa, ya sabes que me puede esta bocaza.
  • Yo al principio pensaba que no ibas a durar dos días…
  • Los tiempos cambian, y las personas también.
  • ¿Ha mejorado algo? ¿O es como aquella vez que decidiste pasar de las mujeres?
  • Esto es bastante más fácil que aquello.
  • Sin duda.
  • Pero ya te digo, es imposible cumplirlo a rajatabla.
  • Entonces… ¿cualquiera que quiera hablar contigo debe hacerlo haciendo preguntas muy concretas?
  • Mmmmm… cualquiera no, depende de quien. Hay a quien sí le doy mi opinión.
  • Dos o tres, como mucho.
  • O uno…
  • Ya…
  • Esto parece una entrevista.
  • Lo parece, si señor. ¿Qué te gustaría que te preguntaran?
  • Jajajaja… depende. ¿Se supone que soy alguien famoso?
  • Jajajaja! Claro que no! Se supone que eres tú.
  • Pues… no lo sé… supongo que algo trivial. Bueno, si es una tia…
  • Qué, si es una tía, qué, acojonao!
  • Bueno, pues si es una tía… ¿te vienes a tomar algo? Por ejemplo, algo sencillo de entender… fácil.
  • ¿No hay ninguna pregunta que te gustaría que te hicieran, en general?
  • Supongo que no… ¿y a ti?
  • Mmmm… ¿tienen oídos las paredes?
  • Jajajaja! Está bien. ¿Tienen oídos las paredes?
  • Desde luego yo si. Pero no tenemos boca.
  • Eso quiere decir…
  • Que de todo lo que oímos no podemos transmitir nada. Si algo trasciende no es culpa nuestra, es alguien que lo ha ido diciendo.
  • Entonces tienes que saber muchas cosas…
  • Bueno, saben más otras paredes que yo… pero sí, supongo que sí.
  • ¿Sabes quién ha sido?
  • No. Sé lo que oigo, así que no me preguntes quien creo que es. Te conozco.
  • Era la siguiente pregunta…
  • Lo sabía.
  • Entonces sí que sabes mucho.
  • Lo suficiente. De algunos más que de otros.
  • ¿Sabes mucho de mí?
  • Lo suficiente.
  • Ahora eres tú el esquivo.
  • No sé si lo sé todo, pero algo sé.
  • ¿De quién más sabes?
  • Secreto profesional.
  • Jajajajaja
  • Es cierto. Tenemos unas normas, no te creas. Estamos organizadas.
  • ¿Os lleváis bien con las paredes de alto copete? No sé, las de la Moncloa, las del parlamento, las de la casa de Jesulín…
  • Jajajaja! Esas últimas no saben nada! Todo pasa fuera de casa… De las otras… pues no nos vemos mucho, pero son amables… algo viejas y aburridas, pero buena gente.
  • Se está desviando la conversación…
  • Eso siempre pasa contigo, lo sabes.
  • Sí. Pero no consigo llevarla a mi terreno, siempre me ganan.
  • No te gustaría que te preguntaran ¿qué tal?
  • Es una pregunta demasiado amplia y ambigua, nunca sé que contestar.
  • Bien, mal, podría estar mejor…
  • Si, claro, hay muchas respuestas: jodido y mal pagado, nunca he estado mejor, como siempre… muchas.
  • ¿Cuál darías tú?
  • Depende de a quien.
  • ¿Cómo? ¿Según tu interlocutor respondes una cosa u otra?
  • Sí, claro.
  • ¿Y a cada uno le dices lo que quiere oír?
  • No soy de esos. Les digo lo que pienso.
  • O mientes, claro.
  • Yo no miento. Suelo contestar: como siempre. Pero si es alguien de confianza me explayo un poco más.
  • Claro.
  • ¿Tú qué contestarías?
  • Mmmm… blanca, de pie, aguantando…
  • Humor de paredes.
  • Jajajaja! Es como el de informáticos.
  • Jajajaja! Ni de coña! Es mejor el de los informáticos.
  • Sois todos unos frikis.
  • Probablemente.
  • Tus respuestas siempre son esquivas… Serías un mal entrevistado.
  • No siempre, volvemos a lo de antes, depende del interlocutor.
  • No es del todo cierto… siempre son esquivas.
  • Digamos que en el 90% de las ocasiones.
  • Un porcentaje muy alto.
  • Quizás demasiado.
  • Poco puedes hacer, ¿No?
  • Siempre se puede hacer más.
  • Otra esquiva…
  • Entra dentro del 90%.
  • Cierto.
  • ¿Matamos algunas neuronas?
  • Yo no tengo, pero apoyo tu iniciativa.

Ida de olla patrocinada por La Vieja Familia, si tienes un problema, llámanos, acabaremos con él haciendo que parezca un accidente. Ofertas en arruinar vidas. Este mes arruinamos estudios con la compra de dos vidas. Consulte nuestros precios. Descuentos por familia numerosa.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esto... me sabe fatal interrumpir tus profundas conversaciones con la pared pero... ¿te encuentras bien? jajaaaa... Me has dado un poco de miedo pero, tranquilo, yo también hago cosas de estas a veces... solo que no duro tanto. Un saludo!! ;)

Anónimo dijo...

¿cuándo vas a dejar de hablar con las paredes? :p

Creative Commons License
Esta obra está publicada bajo una licencia Creative Commons.