sábado, 29 de abril de 2006

Información y más...

Hasta la picha estoy de la jodida información. Joder, que no quiero estar informado! De verdad que agradezco vuestro esfuerzo (aunque no creo que sea un esfuerzo, para algunos es todo un placer), pero no me apetece saber nada de ciertos aspectos de la sociedad. Que no joder, que no. Apelo a mi derecho de no estar informado. Si es necesario que no se me informe de absolutamente nada… es preferible.
Y luego está la cobardía y la estupidez. Porque hay gente que a parte de cobarde es estúpida y hasta ridícula. Debo de dar bastante miedo… porque si no, no se. Luego también está la hipocresía… que gran actitud la del hipócrita, que se lo digan a los políticos. Es lo de siempre, haz lo que digo… ya sabéis. Debe ser que a cierta gente le incomoda la presencia de cierta otra gente. O que se avergüenza… de conocerme, supongo. En el fondo lo entiendo. Entiendo que una palabra vale más que cincuenta actos. Un insulto vale más que horas de escucha, hombros dispuestos, espaldas anchas, comprensión y consejo. Lo entiendo, como entiendo que soy de lo peor, que doy asco y que no caigo bien. Lo sé. Como también sé que pueden más dos tetas que dos carretas… sabiduría popular. Entiendo que en presencia de según quién es mejor no hacer ni decir según qué… y sólo yo me entiendo… bueno, alguien más fijo que también… y fijo que algunos se imaginan cosas… y fijo que no aciertan.

“La mierda es la mierda con o sin ojos azules”
La rebelión de los maquinas, Hablando en Plata

Luego está ella. Ella es… ella fue… ella ha sido… no se que tiempo verbal usar. En realidad yo fui con ella, ella ni siquiera fue. Yo pensaba que éramos… y resulta que yo si que era, pero ella no. Y eso es difícil. Y raro. Yo estaba de puta madre… hasta que hubo distancia. Luego sufría. Pero lo llevaba de puta madre. Nunca se me ha dado bien estar mal. Yo era. Y me desahogaba con ella, pero ella… ni era, ni quería ser. Antes me parecía que si que era, y yo era más porque ella era, pero ahora me he dado cuenta de que vivía engañado. Todo era mentira, ¿no es cierto? No encuentro otra explicación. Porque… si no era mentira… ¿qué coño está pasando? Ahora hemos vuelto a parecer… pero ya nunca seremos… aunque me cueste admitirlo. Fue mucho lo que te di, para no recibir apenas nada… y para que ahora se pudra en el fondo de mi negro corazón un sentimiento que, igual que floreció de repente, murió degollado. Nada pienso hacer por él. Aunque hace poco haya gritado desesperado que le hiciera caso, que le diera otra oportunidad… no creo que se la merezca… y no estoy seguro de que tu te la merezcas… no se mentir, lo siento. Pero suelo hablar de más. Sabes de sobra que estoy a tus pies, que nunca podré dejar de ser… un idiota.

“Si no vale mi opinión, si me calláis la boca”
Idiota, Ketesnuko

Y ahora llegas tú. Y yo no sé… ni siquiera sé si quiero saber… no lo tengo nada claro, lo siento. Nunca he tenido nada claro... y casi nunca sale bien, pero probaré, estoy seguro, nada tengo que perder ya. Sabes de sobra que te cantaría Ballantines entera y sin descanso… aunque me quedara sin aire. Y a lo mejor debería haberlo hecho… a lo mejor… hay tantas cosas a lo mejor. No creo que encajemos, pero me apetece probar… ¿y a ti? Seguro que sí… o eso me han dicho. No te preocupes, tarde o temprano me decidiré… y creo que va a ser ya mismo… nos vemos esta tarde… creo.

“Dentro de mi pensamiento hay un lugar
donde el odio no deja pensar
cuando el tiempo se marcha,
tu te vas y las heridas quedan sin cerrar
yo estoy sufriendo y ya no puedo aguantar más,
siento que me muero, siento que el odio ya no está
(...)
Y unos días mejor y otros peor, pero siempre mal”
Canción tristona, Frutas y Verduras (con Kase.O)

viernes, 21 de abril de 2006

¿Yo?... hipócrita hasta la muerte… ¿no?

Buah! La peña se trastoca por momentos… casi por minutos. Imbuidos en qué sé yo, trastocan la realidad a su gusto, como si esta fuese maleable… y no, es firme, como la roca. Sólida. Inquebrantable. Se creen indispensables por humillar al prójimo… no es que haya que amarlo… no hay que ser radical. Hay un punto intermedio en algún lado. Y si no eres capaz de amar al prójimo, por lo menos respétalo… o ignóralo, joder! Qué feliz ignorancia… si no fuera por la puta información de esta era… dejemos de ensalzarla, es el cáncer que nos destruye!
Tampoco hace falta que descalifiques al prójimo. Sólo si odias, sin razón. Si odias con razón procura revisarla, pues no hay razón para la sin razón, como no hay razón para el odio.
Procura practicar la empatía… haz lo que te gustaría que te hiciesen y evita la hipocresía del haz lo que digo, no lo que hago. Esclaviza tus pensamientos y tus silencios y adopta la esclavitud de tus palabras con orgullo, pues si no es así, deberías habértelas pensado antes de decirlas. Lleva a cabo lo que dices, pues si no entrarás en la hipocresía de predicar algo que no practicas.
Quien te ama te herirá… dicen. Por eso no amo, para no herir. Aunque resulta inevitable… lo que no lo resulta es amar sin herir, digan lo que digan. Si amas no serás herido, igual que tampoco herirás. Demasiado rotundo. La palabra es el medio de amar y de herir, mídelas.
Alguien dijo algo parecido… no se. Y que es preferible ser herido por quien te ama que los besos del que te odia… por eso tampoco beso. Pues el que lo dijo no sabía de qué hablaba… en fin.

“si tan fácil es ser persona,
¿por qué a mi se me amontonan las deudas
por lo de "lo prometido es deuda"?”
Javat y Kamel, R De Rumba

Eh! Ni puto caso a estos preceptos… nada, no sirven para nada.
Total… semos personas, sin más. Lo queramos o no. Trozo de materia pasajera.
Además, no todos entenderán esos preceptos. Y no todos valen para cumplirlos. Creo que solo yo… o ni siquiera yo… alguno no habré cumplido… o no. Me confieso, estuve cercano al odio, casi podía olerlo. Cada uno debe tener sus propios preceptos, ¿no? Hay gente que ser rige por la mentira, el odio, la vergüenza… tiene que haber gente para todo, claro.
Y luego a algunos nos cuesta tanto… nos cuesta tanto…

“No se por qué me cuesta tanto... (¿el qué?)
Vivir, joder, sentirme bien, entonar cada día el desencanto que...
es un arco iris con toda la gama gris...
la bilis negra, negatividad invade mis...
putos sensores y cada polo detecta y traduce:
’Eso que reluce no es oro...’”
Nací muerto, Sr. Rojo (con Rush y Kase.o)

domingo, 9 de abril de 2006

Es más, yo soy el límite…

No tengo techo ni límite. Ni físico ni psicológico. Bueno… es demasiado prepotente. El caso es que no lo he encontrado. Y eso me alegra. Soy capaz. Simplemente. Capaz de soportar lo indecible! Bueno, algo exagerado.
Soy un hombro y unos oídos. Una mano y unas piernas. Unas espaladas… y menudas espaldas! Unas piernas cansadas. Una mano gastada. Un hombro empapado. Y unas espaldas resistentes… hasta que estallan. Y se vacían. Nunca lo suficiente.
Vivo como si la muerte no existiera, nada quiero, nada espero, nada llega. Me dejo llevar por la vida, ella me guía. Fluyo. Sin más. Lo he conseguido. No hago nada, y así nada queda por hacer.

"Como en mi caso, como en el de todo el mundo, la mitad del código de su vida ya había sido escrito antes de que la chica hubiese sido lo bastante mayor como para comprender lo que está ocurriendo. Lo único que podía hacer ahora era mirar cómo se desarrollaban las instrucciones"
Pàg. 110, Clones, de Michael Marsahall Smith

Tiene una desventaja. Algunos acontecimientos me gustaría que pararan un tiempo, que no solo fluyeran… pero bueno, un pequeño pero, aceptable, la perfección no debe de existir.
Ni una sola decisión. Ni una sola opinión. Bueno, alguna se escapa. En realidad no soy. Non cogito, ergo non sum. Mi intención en la vida es no ser, para llegar a ser / No soy un héroe, a mí si me salvan la vida cada día. No hago más que escuchar. A veces, por supuesto, me toca hablar. Pero son las menos. Y a lo mejor me gusta y todo, no digo que no. Esto no es una queja, desde luego, es una opinión. Al final y sin quererlo soy sociable. Porque todavía no me has abandonado.
Creo que ya todo me llena… o nada. Y solo una cosa me vacía.

Oh! (H)Elena, por ti se inició una guerra… y me traes maría… acabas de entrar en el altar destinado a los ángeles… y no sólo por la maría. Sonríe, pues tu sonrisa ilumina al mismo sol. Ponte seria, pues abres más los ojos y… son preciosos. No se que es… pero es. Pero tú estás en un periodo de paz, sabemos de que hablo, y no te conviene entrar en guerra.

En otro orden de cosas… la información sigue fluyendo… sin poder evitarlo. Escucho noticias que no quiero escuchar, y no porque me sienten mal, simplemente no me interesa. Me informan de cosas de las que no quiero ser informado… y es que es lo que tiene vivir en la sociedad de la comunicación… en fin. Aun no viendo informativos te informan... ¿y si yo quiero vivir al margen de la información, qué?

“me rallo con cada palabra,
dicen ¡Te rallas por todo, joder te rallas por nada!,
oka, no hay silencio en una ciudad y eso es muy duro,
tan duro como vivir con este miedo al futuro,
voy a gastar mi dinero en regalos,
quiero dar vacaciones a mi ego y liberar el caos,
no guardaré ni un duro para el cementerio,
si la conciencia pide cuentas tengo un proyecto paralelo”
Javat y Kamel, RdeRumba
Creative Commons License
Esta obra está publicada bajo una licencia Creative Commons.